Para acabar con el dilema cómo llamar a las especialistas en obstetricia, en concreto el dilema está entre matrona o comadrona. Mucha gente duda con estos nombres y otra piensa que son dos profesiones semejantes, pero diferentes. Un pensamiento totalmente equivocado ya que el nombre oficial de esta profesión es la de “Enfermera especialista en obstetricia y ginecología” aunque coloquialmente se nos conoce, al menos en España como “matronas“, aunque se nos sigue llamando “comadronas” y hay otros países como algunos latinoamericanos en las que este término está más extendido. El término de “partera” está también extendido en muchos países.
Por tanto, podemos afirmar entonces, que el nombre que se nos da de matronas o de comadronas es totalmente correcto en todos los ámbitos, pero el que está más extendido a día de hoy es el de matrona.
Las comadronas
El oficio de comadrona, como se ha conocido a lo largo de la historia es uno de los oficios más antiguos del mundo. Desde siempre las mujeres con experiencia actuaban como comadronas en los partos de mujeres más jóvenes conocidas o familiares para ayudar durante el parto. Eran, en realizad, personal no cualificado, si en cuanto a estudios nos referimos, pero cualificado si hablamos de experiencia en partos.
Sabían perfectamente ayudar a las mujeres en los partos, pero carecían de la experiencia y estudios necesarios en partos con complicaciones. Por esa razón dar a luz en los siglos anteriores al XVIII tenía mucho más riesgo del había a comienzos del siglo XX, época en la que aparecieron los médicos obstetras, con formación en partos complicados.
La mortalidad de las madres durante el parto llegó a alcanzar el 30% debido a muchos factores, entre los que destacan el uso de malas prácticas y la intervención de médicos que atendían partos justo después de realizar otras tareas, como autopsias sin haberse lavado las manos, lo que provocaba infecciones que provocaban la muerte. La mortalidad se redujo drásticamente a partir de 1960 hasta límites que se acercan mucho al 0%.
Las matronas
¿Y por qué divido en dos secciones matrona o comadrona? Como hemos hablado antes, no tiene sentido pero por seguir el curso lógico de la entrada, se dividirá para empezar a hablar del momento en el que la antigua partera o comadre se convirtió en matrona. Las primeras referencias de la palabra “matrona” aparecen en el Siglo XVIII en el que se habla de ellas como parteras cualificadas.
El primeros estudios reglados de matronas en España datan del año 1790, en concreto se dio en el colegio Pablo Ferrándiz Bendicho dónde se impartían lecciones de la cátedra de partos en el que se registraron un total de treinta y dos mujeres.
Coincidiendo con el año de los primeros estudios reglados, se elaboró el primer censo de comadres del país. Fue un censo poco funcional ya que casi ningún alcalde consiguió censar a las mujeres que ejercían el oficio de partear. Se registraron un total de 23 comadronas, pero se mencionaron otros nombres de las que no se consiguió información adicional y otras que ejercían por caridad en centros de la beneficencia.
Por tanto, podemos afirmar que matrona o comadrona o partera o comadre son los términos con los que se nos conoce a las enfermeras especialistas en obstetricia en ginecología en España y todos los términos aquí utilizados son igual de válidos en todos los ámbitos.
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